El 13 de diciembre de 2025, el cometa 3I/ATLAS—el tercer objeto interestelar confirmado que se ha encontrado cruzando nuestro sistema solar—vuelve a ser noticia mientras los astrónomos publican nuevas observaciones que profundizan el misterio (y la ciencia) de este raro visitante cósmico. No es solo “otro cometa”: 3I/ATLAS es un forastero de más allá de la familia gravitacional del Sol, que atraviesa en una trayectoria hiperbólica que prueba que no nació aquí. [1]
Los desarrollos de hoy añaden dos capítulos llamativos a la historia:
- Nuevas observaciones de Gemini North muestran que 3I/ATLAS se vuelve más brillante y claramente más verde, una firma clásica de cometa vinculada a los gases liberados tras el calentamiento solar. [2]
- El XMM‑Newton de la ESA ha captado ahora el cometa brillando en rayos X, mientras que la misión XRISM de Japón informa de un halo de rayos X débil y extendido que podría revelar cómo el viento solar interactúa con los gases del cometa interestelar. [3]
Todo esto llega apenas días antes del acercamiento más próximo del cometa a la Tierra el 19 de diciembre de 2025—una alineación segura pero científicamente valiosa que los investigadores consideran una oportunidad única en una generación. [4]
¿Qué es el cometa 3I/ATLAS y por qué es tan importante?
3I/ATLAS es oficialmente un cometa interestelar, lo que significa que proviene de fuera de nuestro sistema solar y no está ligado gravitacionalmente al Sol. La etiqueta “3I” es histórica: es solo el tercer visitante confirmado de este tipo, después de 1I/ʻOumuamua (2017) y 2I/Borisov (2019). [5]
Fue detectado por primera vez el 1 de julio de 2025 por el telescopio de sondeo ATLAS en Río Hurtado, Chile, y rápidamente fue identificado como interestelar debido a su trayectoria inusual. [6]
Si has visto el otro nombre circulando—C/2025 N1 (ATLAS)—ese es el nombre alternativo del cometa bajo el sistema de denominación de la Unión Astronómica Internacional. [7]
Lo que hace que los cometas interestelares sean tan valiosos es simple: son “muestras extranjeras”. Cada cometa formado alrededor del Sol comparte cierta química e historia en común. Un cometa interestelar lleva pistas sobre la formación de mundos alrededor de otra estrella, entregadas directamente a nuestro alcance de observación—brevemente. [8]
Las fechas clave: dónde ha estado 3I/ATLAS y hacia dónde va
Esta es la cronología contra la que trabajan los científicos:
- 1 de julio de 2025: Descubrimiento por ATLAS (Chile). [9]
- Septiembre de 2025: La NASA señala que el cometa fue visible para telescopios terrestres hasta septiembre, antes de volverse demasiado cercano al resplandor del Sol. [10]
- 29–30 de octubre de 2025: Máximo acercamiento al Sol (perihelio), justo dentro de la órbita de Marte. [11]
- Principios de diciembre de 2025: El cometa reaparece para nuevas observaciones después de pasar detrás del Sol desde la perspectiva de la Tierra. [12]
- 19 de diciembre de 2025: Máximo acercamiento a la Tierra—unos 270 millones de km (170 millones de millas) de distancia, aproximadamente 1.8 UA, sin amenaza para el planeta. [13]
- Primavera de 2026: El cometa continúa hacia el exterior, con los observadores enfocándose en cuánto más se puede aprender a medida que sale del sistema solar interior. [14]
Novedad de hoy: Gemini North observa un cometa interestelar más verde y cambiante
Una de las actualizaciones más comentadas el 13 de diciembre es la publicación de nuevas imágenes del telescopio Gemini North que muestran a 3I/ATLAS con un brillo notablemente verdoso tras reaparecer de detrás del Sol. Las observaciones se tomaron el 26 de noviembre de 2025 usando el Espectrógrafo Multiobjeto Gemini (GMOS) en Maunakea, Hawái. [15]
¿Por qué el cometa se ve verde?
Múltiples informes señalan al mismo culpable: carbono diatómico (C₂)—una molécula que puede emitir una luz verdosa cuando la luz solar energiza la coma en expansión del cometa. Esto no requiere nada exótico; es un comportamiento conocido que también se observa en muchos cometas “locales” del sistema solar. [16]
Lo intrigante es el cambio. Los investigadores señalan que 3I/ATLAS parecía más rojizo en observaciones previas de Gemini, pero ahora se ve significativamente más verde—evidencia de que el cometa está liberando diferentes moléculas a medida que responde a su viaje por el sistema solar interior. [17]
Por qué esto importa científicamente
Los cambios de color no solo son bonitos—pueden ser pistas sobre la composición y la actividad. A medida que el material interestelar se calienta cerca del Sol, los volátiles enterrados pueden empezar a liberarse, y nuevas especies químicas pueden dominar el brillo de la coma. Precisamente este tipo de señales son las que los científicos buscan antes de que el visitante se desvanezca nuevamente en el sistema solar exterior. [18]
El otro titular: 3I/ATLAS ahora también es un cometa de rayos X
La historia instrumental más significativa de esta semana puede ser el cambio de imágenes en luz visible a astronomía de rayos X—un enfoque poco común en la ciencia de cometas, y especialmente raro para objetos interestelares.
XMM‑Newton de la ESA detecta rayos X de 3I/ATLAS
La ESA informa que su observatorio espacial XMM‑Newton observó 3I/ATLAS el 3 de diciembre de 2025 durante unas 20 horas, cuando el cometa estaba a unos 282–285 millones de km de la nave. La observación utilizó la altamente sensible cámara EPIC‑pn de XMM‑Newton. [19]
¿Por qué un cometa emitiría rayos X? La ESA explica que se esperan rayos X cuando el gas que fluye del cometa colisiona con el viento solar, produciendo emisión de rayos X. [20]
La ventaja es que las observaciones en rayos X pueden ayudar a investigar gases que son difíciles de detectar en óptico/UV—la ESA destaca específicamente la sensibilidad a hidrógeno (H₂) y nitrógeno (N₂), que pueden ser casi invisibles para muchos otros instrumentos. [21]
JAXA informa de un débil y extendido resplandor de rayos X con XRISM—con cautela
La misión XRISM de Japón (Misión de Imágenes y Espectroscopía de Rayos X) publicó una actualización detallada a principios de este mes (6 de diciembre) describiendo una campaña dedicada de Objetivo de Oportunidad: XRISM observó del 26 al 28 de noviembre de 2025, con una exposición efectiva de 17 horas usando su instrumento de rayos X suaves Xtend. [22]
El análisis preliminar de XRISM encontró un débil resplandor de rayos X que se extiende aproximadamente 5 minutos de arco, lo que corresponde a unos 400,000 km alrededor del cometa—lo que sugiere una posible nube de gas difusa interactuando con el viento solar. [23]
Pero XRISM también pide cautela: estructuras extendidas similares pueden ser producidas por efectos instrumentales (como viñeteo o ruido del detector), por lo que se requiere un análisis adicional antes de confirmar que la emisión es realmente de origen cometario. [24]
Una persecución por todo el sistema solar: naves espaciales en Marte, cerca del Sol y más allá
3I/ATLAS no está siendo observado por un solo telescopio. La NASA describe una campaña de observación inusualmente amplia que involucra múltiples naves espaciales y telescopios espaciales, con vistas particularmente cercanas obtenidas desde Marte. [25]
Marte proporcionó algunas de las vistas más cercanas
La NASA dice que las imágenes más cercanas provinieron de la órbita de Marte, donde tres activos de la NASA observaron el cometa. El Mars Reconnaissance Orbiter (MRO) capturó una de las imágenes más cercanas, y MAVEN recolectó observaciones en ultravioleta útiles para estudios de composición. [26]
Viendo lo que la Tierra no pudo durante el resplandor solar
Cuando el cometa pasó detrás del Sol desde la perspectiva de la Tierra, las misiones de heliofísica ayudaron a cubrir el vacío. La NASA señala que SOHO observó el cometa del 15 al 26 de octubre, y describe cómo se usó el procesamiento y apilado para extraer una señal que se esperaba fuera demasiado débil. [27]
Psyche también se unió a la campaña
La NASA también informa que la misión Psyche rastreó el 3I/ATLAS durante ocho horas el 8–9 de septiembre de 2025, cuando el cometa estaba a unos 53 millones de km (33 millones de millas) de la nave espacial—datos que ayudan a refinar la trayectoria del cometa. [28]
¿Qué tan cerca pasará el cometa 3I/ATLAS de la Tierra—y se puede ver?
A pesar de la expectación, 3I/ATLAS no es una “aproximación cercana” en ningún sentido práctico. La NASA y la ESA enfatizan que permanecerá muy lejos.
- La ESA indica que la máxima aproximación a la Tierra será de unos 270 millones de km el 19 de diciembre de 2025 y afirma que no representa ningún peligro. [29]
- La NASA dice de manera similar que el cometa permanecerá lejos de la Tierra, y que su paso del 19 de diciembre seguirá estando a unos 170 millones de millas de distancia. [30]
Dónde mirar (y qué necesitarás)
La guía de observación de la NASA para diciembre es clara: esto es territorio de telescopios. Para los observadores, la mejor oportunidad es alrededor de la ventana de máxima aproximación, mirando al este-noreste en la madrugada, con el cometa apareciendo cerca de Regulus (Leo). La NASA sugiere una apertura de telescopio de al menos 30 cm. [31]
Timeanddate.com también subraya que será demasiado tenue para el ojo desnudo, incluso en su máxima aproximación. [32]
El rumor del “cometa alienígena”—y la respuesta de la NASA
A medida que 3I/ATLAS se discute más ampliamente, una narrativa paralela lo ha acompañado: afirmaciones de que podría ser artificial.
La NASA ha abordado directamente esa especulación. En un informe de Reuters de noviembre ampliamente citado, funcionarios de la NASA dijeron que no han observado “tecno-firmas” y describieron el objeto como comportándose como un cometa—mientras que científicos externos citados en el artículo rechazaron la idea de una nave alienígena por carecer de fundamento. [33]
Esa resistencia importa porque la historia real ya es extraordinaria: estamos observando un cuerpo interestelar natural—probablemente formado alrededor de otra estrella—reaccionar a nuestro Sol en tiempo real, a través de longitudes de onda desde el ultravioleta hasta los rayos X. [34]
Lo que los científicos esperan aprender a continuación
Incluso con los principales telescopios y naves espaciales involucrados, las preguntas más importantes siguen abiertas—especialmente para un cometa que puede representar condiciones químicas de un sistema planetario completamente diferente.
Entre las líneas de investigación que ahora están en foco:
- Composición bajo calentamiento: La ESA señala que las observaciones del JWST de la coma han revelado gases incluyendo dióxido de carbono, agua, monóxido de carbono, sulfuro de carbonilo, y hielo de agua a medida que el cometa se calentaba. [35]
- Firmas metálicas como el níquel: Reuters informa que los científicos han visto moléculas familiares de cometas además de “mucho níquel”, lo cual es sorprendente pero no sin precedentes en los estudios de cometas. [36]
- Diagnóstico de rayos X para hidrógeno y nitrógeno: La ESA plantea los rayos X como una forma de detectar gases que los instrumentos ópticos y ultravioleta tienen dificultades para ver—potencialmente crucial para entender de qué está hecho 3I/ATLAS y cómo se compara con visitantes interestelares anteriores. [37]
- Mejoras en la órbita y habilidades de predicción: La ESA señala que las observaciones de naves espaciales desde Marte ayudaron a refinar la ubicación predicha del cometa, y que este tipo de seguimiento multipunto es un ensayo útil para la preparación de defensa planetaria—aun cuando el objeto no representa una amenaza. [38]
Y más allá del propio 3I/ATLAS, las agencias también están extrayendo lecciones sobre preparación. La ESA señala sistemas futuros como Neomir, diseñados para reducir el punto ciego en dirección al Sol que dificulta el seguimiento temprano de visitantes rápidos. [39]
Conclusión para el 13 de diciembre de 2025: un visitante raro, ahora visto en luz verde y rayos X
A partir de hoy, el cometa 3I/ATLAS está ofreciendo exactamente lo que los astrónomos esperaban: nuevos datos, nuevas longitudes de onda y nuevas pistas, justo a tiempo para su hito de máxima cercanía a la Tierra el 19 de diciembre. Gemini North muestra una coma en evolución que se ha vuelto más verde con nuevas señales de liberación de gases. El XMM‑Newton de la ESA añade la perspectiva de rayos X, mientras que los resultados preliminares de XRISM sugieren un halo extendido que podría enseñar a los científicos cómo los gases del cometa interestelar interactúan con el entorno del viento solar. [40]La ventana no permanecerá abierta mucho tiempo. Pero por ahora, 3I/ATLAS está haciendo algo que muy pocos objetos en la historia humana han hecho: permitirnos estudiar un fragmento de otro sistema estelar—sin salir de casa. [41]
References
1. science.nasa.gov, 2. phys.org, 3. www.esa.int, 4. science.nasa.gov, 5. www.esa.int, 6. www.esa.int, 7. www.esa.int, 8. www.esa.int, 9. www.esa.int, 10. science.nasa.gov, 11. www.esa.int, 12. science.nasa.gov, 13. science.nasa.gov, 14. www.esa.int, 15. phys.org, 16. www.livescience.com, 17. www.livescience.com, 18. www.esa.int, 19. www.esa.int, 20. www.esa.int, 21. www.esa.int, 22. www.xrism.jaxa.jp, 23. www.xrism.jaxa.jp, 24. www.xrism.jaxa.jp, 25. science.nasa.gov, 26. science.nasa.gov, 27. science.nasa.gov, 28. science.nasa.gov, 29. www.esa.int, 30. science.nasa.gov, 31. science.nasa.gov, 32. www.timeanddate.com, 33. www.reuters.com, 34. www.reuters.com, 35. www.esa.int, 36. www.reuters.com, 37. www.esa.int, 38. www.esa.int, 39. www.esa.int, 40. phys.org, 41. www.esa.int

